Te lo cuento tal cual, sin adornos

Mi experiencia fue terrible. Las habitaciones son muy pequeñas y lo más alarmante es la falta de aire acondicionado. Las paredes están agrietadas, lo que puede provocar lesiones. Además, al abrir las ventanas para ventilación, entran muchos insectos. No lo recomiendo.

El salmón ahumado en el desayuno fue una joya, casi me hizo querer quedarme para siempre. disfruté de las vistas al río y la sala de estar, perfecta para relajarte con un café en mano.

Aunque el calor en la habitación era un poquito molesto, la comodidad y la limpieza hicieron que todo brillara al final.

Las vistas al río desde la terraza fueron realmente impresionantes, especialmente durante el desayuno.

La habitación era pequeña y calurosa, y no contaba con aire acondicionado, lo cual dificultó el descanso.

Las vistas al río eran preciosas y tranquilas.

El wifi es gratuito, aunque las habitaciones son ruidosas por el tráfico exterior.

explora cercanías y disfruta de vistas únicas

Durante mi estancia, disfruté enormemente de las increíbles vistas al río, perfectas para descansar después de un día de exploración, y la cercanía a lugares emblemáticos como la Capilla de San Antonio y el puente romano, ambos a menos de 5 minutos caminando.

Disfrutamos mucho de nuestra estancia. Las vistas al río eran increíbles y el desayuno variado nos encantó. Definitivamente volvería a elegir este lugar.

Pasamos tres noches en el hotel Capitán y la experiencia fue muy buena. La terraza donde se sirve el desayuno es increíble y disfrutar del café con la vista al río fue lo mejor. Además, el personal nos brindó excelentes indicaciones sobre dónde cenar y cómo llegar a los Lagos de Covadonga.

El wifi podría mejorar.

La habitación era pequeña y hacía mucho calor, aunque el ventilador ayudaba algo.

La ubicación es perfecta para explorar Asturias. Las vistas desde la terraza son una maravilla, y el aparcamiento es muy fácil.

El wifi es más intermitente que mi ilusión por hacer ejercicio!

La habitación, aunque pequeña, presentaba un baño en buen estado. Disfrutamos de la experiencia, de la cercanía al río y la oportunidad de descansar tras actividades diarias.

El calor fue una pesadilla, ya que no había aire acondicionado ni ventilador, lo que hizo que la noche fuera incómoda. Además, la habitación estaba justo enfrente de un cartel luminoso, lo que dificultaba abrir la ventana sin que entraran insectos. El ruido constante de los coches pasando abajo hizo que descansar bien fuera un desafío.

La habitación tenía una buena vista, pero fue difícil descansar debido al ruido de los huéspedes adyacentes. Además, el trato del personal en momentos críticos fue desconcertante y no muy profesional. Sería un lugar adecuado para estancias cortas, aprovechando las vistas, pero mejoraría la atención y el control del ruido.

Las vistas al río eran increíbles y disfruté mucho del desayuno variado. El salmón ahumado fue una joya, y relajarme en la terraza con un café mientras admiraba el paisaje fue lo mejor de mi estancia. aprecié la tranquilidad, que contribuyó a un ambiente relajado.

La habitación era pequeña y hacía mucho calor, lo que dificultó dormir bien. Además, entraban muchos insectos cuando abría la ventana para ventilar, lo que fue un poco molesto.

El aparcamiento es súper cómodo y la habitación, aunque simple, tiene todo lo necesario para una buena estancia.

estaba como en casa, no he tenido ningún inconveniente